Hoy asistí a un seminario con Ricardo Hausmann y Eduardo Loría en la EGAP. Me llamó la atención un comentario de uno de los profesores; dice algo así como lo siguiente: voy a decir algo aquí porque estamos en confianza, no me atrevería a decirlo afuera… Uno de los problemas en México es que los políticos obedecen a sus intereses propios y por lo tanto no hacen o dicen lo que es bueno para el país, sino lo que es bueno para conservar su empleo… por otro lado los académicos no se involucran en la vida política y empresarial, no opinan, en cambio la gente que opina en los medios es gente no preparada, haciendo trabajo de baja calidad.
Me pregunto si se incluyó a sí mismo en lo que dijo. Dado que no lo diría afuera creo que pertenece al grupo de los que “no hacen nada”. Típico comportamiento de quedarse al margen de los problemas, los discutimos y a lo mucho pretendemos hacer algo. Pocos son los que actúan realmente, y mis hipótesis son: ninguno está políticamente comprometido, ninguno invierte más tiempo enfrente de la televisión que absorbiendo información útil, ninguno pretende mostrar que sabe lo que sabe, ninguno hace declaraciones en lo obscurito.
¿Por qué no lo dice afuera? Tal vez por la misma razón que yo no lo he hecho. Muy probablemente no sea así.
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